Felicitadme si quereis. Supongo que, con sus achaques de edad, estar viva ya es para felicitar. Y yo, desde el viernes, llevo viva 35 años. El año que viene podré decir 18 por 2. Como regalo de cumpleaños este sábado pasado un amigo me invitó a cenar.
_ ¿Dónde vamos?
_ Yo te guío: es una sorpresa....
Odio las sorpresas. Lo que más odiaría sería una fiesta sorpresa. Vienes del trabajo, sucia, amargada y pensando que lo único que te ha faltado hoy ha sido ponerte a cuatro patas, y al abrir la puerta de casa te encuentras a ciento y la madre gritando y felicitandote. Como nunca he estado en el caso no sé cómo reaccionaria, la verdad. Para seguir con esta historia surrealista diré que me hizo aparcar delante de un hotel de cuatro estrellas....
_ Rey, si lo que querias era regalarme una noche loca podríamos haber ido al hostal _ le digo riéndome...
_ No seas burra.... voy a invitarte a cenar a un restaurant de cocina creativa...
Me miro: con mis tejanos con los bajos roidos, mis alpargatas de cuña de las rebajas (coronel tapioca pero alpargatas de esparto al fin y al cabo), mi camiseta negra del decathlon y mi bolso tejano en bandolera. Dos trenzas por peinado. Y pensé seriamente en matarlo....
_ No me van a dejar ni entrar a recepción.
_ Tranquila que está todo reservado.
Habla con recepción y pasamos a una sala minimalista, en colores claros, butacas con brazos para sentarse. Mentalmente me voy diciendo: recuerda todo lo que te explicaron en la boda de tu primo el aspirante a pijo, rápidamente. Nos sientan y mi amigo, ese que come las patatas fritas con las manos, atento me retira la silla como si estuviese cenando alli con amigas toda la vida de dios. Me pongo la servilleta en la pierna y la camarera, con su delantal y todo, nos trae la carta y la carta de vinos. En la carta tres primeros, tres segundos y tres postres. A mi que me registren, pero le digo que hay más variedad en el menú diario del bar de la esquina de mi calle. Pido una ensalada con puntas de esparragos trigueros. El rissotto de verduras con escamas de parmesano. Tardan mas de media hora en traérnoslo. Me miro mi ensalada con cara de susto...
_ Eis, ¿qué es esto rosa que pulula por aquï? Está bueno y todo...
_Remolacha, col lombarda..... yo que sé....
Nos mira la camarera con cara de resignación, como diciendo que cruz tener que aguantar a los gárrulos con dinero, mientras nos pregunta si queremos pan. Por supuesto que si... trae una bandeja con seis panecillos y pregunta si lo queremos de chapata, de cereales o de semillas de amapola. Elegimos y nos deja UN panecillo del tamaño de una mandarina en un plato con mantequilla y un cuchillo pequeño. Para mi el pan con mantequilla es para el desayuno. Pero el pan ese de amapolas estaba buenísimo. Como los noto un poco rancios con el pan pero la chica no parece dispuesta a volver a repetir. Vienen los segundos: he pedido un solomillo de ternera con cebolla caramelizada, cortezas de yuca y puré de manzana. La chica retira los platos y ¡oh maravilla! Aparece debajo de mi plato en el mantel un enorme rodal de vino....
Era para verle la cara a la camarera. De repente palideció, pidio disculpas entrecortadamente y nos dijo que si le haciamos el favor de cambiarnos de mesa. Le dijimos que no tenía importancia, de buen rollo, pero la chica insistió.... pero nosotros estábamos a gusto allí. De hecho me gusta sentarme en cualquier lugar en los rincones. En seguida nos trajo un plato con tostadas de salmón y alcaparras, nos puso dos trozos de pan más, nos sirvió ella misma el vino. Cuando me acabé mi hojaldre de canela y mi café, nos quiso invitar a orujo de hierbas. Declinamos invitación y entonces vimos salir a un tio joven de cocina que se acercó amablemente y nos preguntó si nos había gustado la cena. Miré a la camarera y comprendí: el chef hacía seguramente también de maître....
_ Todo perfecto_ dijimos los dos a coro.
Pagó él. Yo no sé cuanto costó la cena. Pero cuando salimos le dije:
_ Anda majo que otro día que quieras invitarme a cenar, me bastá con un pincho camionero en Rubí....
Banda sonora de esta nota : Sabor de amor de Danza Invisible.
6.9.06
Esos locos bajitos
He estado poniendome al día leyendo blogs…. El verano para mi es epoca de desengancharse un poco del Messenger, de la mula y de los chats. Estaba de visita por ¡A zancocharse!, riéndome con un post de Paba sobre el comportamiento de su hijo en un gran almacén. Gran observadora esta chica: yo veo a un niño liando un pollo en un supermercado y más o menos pensaría todas las cosas a la vez que comenta ella.
No me gustan los niños. Lo admito. Siempre he sido una sosa hasta de pequeña, una de esas niñas empollonas que con sus cuentos de E nyd Blyton ya pasaba una tarde entera. Y la verdad que mis relaciones con tiernos infantes son…digamos que muy encorsetadas. Que conste que durante mis años de facultad hice canguros y clases a más no poder. Los niños que tenia cada verano acabaron hasta haciendose la cama ellos solos a toque de silbato. Si no se quedaban sin piscina o sin bici o sin trabajos manuales. La madre estaba tan encantada conmigo que el segundo mes me subió el sueldo y, al año siguiente, me volvió a contratar pese a que su marido estaba en el paro. Me dio permiso para darles una zurra si convenia. Pero pense que si ella no tenia redaños para hacerlo, no iba a pretender que lo hiciese yo. Una chochona…. Es lo que realmente pensaba de ella.
Todo esto viene al caso porque hace unos años conoci a los niños de mi compañera de trabajo. Cinco y tres años respectivamente. El día que conoci al mayor me soltó que su padre iba a apuntarle a karate “para dar hostias asi, placa placa”. Confieso que me asusté. Eran dos fieras de marca mayor. De los que se tiraban al suelo de las rabietas, se subian a todos los cochecitos de monedas, los castigaban en el patio por pegar a sus compañeros…. Su madre los miraba impasible mientras yo me escondia donde podía para que no viesen que iba con ellos. Un día hasta se lo solté: vaya cuajo que tienes, bonita….
Me miró suspirando.Anda, llevatelos un ratito…. Y veras. Jo si vi… en una hora se pegaron con dos niños en el parque, desmontaron una estantería de pelotas en un todo a cien, les tuve que pagar un cacaolat a cada uno, uno de ellos se enfado, se clavó en el suelo y tuve que llevarlo a su casa en brazos… cuando volví le dije: Ahora te entiendo
Y es que si no desarrollas una especie de halo de santidad y calma que ni el dalai lama…te vuelven loca…que es lo que hicieron esa tarde los joios niños…
Después de aquella tarde decidi ligarme las trompas voluntariamente..pero mis amigas me dijeron que sin tener hijos no te lo hacen….. curiosa paradoja…
Banda sonora de esta nota: Esos locos bajitos de Serrat
No me gustan los niños. Lo admito. Siempre he sido una sosa hasta de pequeña, una de esas niñas empollonas que con sus cuentos de E nyd Blyton ya pasaba una tarde entera. Y la verdad que mis relaciones con tiernos infantes son…digamos que muy encorsetadas. Que conste que durante mis años de facultad hice canguros y clases a más no poder. Los niños que tenia cada verano acabaron hasta haciendose la cama ellos solos a toque de silbato. Si no se quedaban sin piscina o sin bici o sin trabajos manuales. La madre estaba tan encantada conmigo que el segundo mes me subió el sueldo y, al año siguiente, me volvió a contratar pese a que su marido estaba en el paro. Me dio permiso para darles una zurra si convenia. Pero pense que si ella no tenia redaños para hacerlo, no iba a pretender que lo hiciese yo. Una chochona…. Es lo que realmente pensaba de ella.
Todo esto viene al caso porque hace unos años conoci a los niños de mi compañera de trabajo. Cinco y tres años respectivamente. El día que conoci al mayor me soltó que su padre iba a apuntarle a karate “para dar hostias asi, placa placa”. Confieso que me asusté. Eran dos fieras de marca mayor. De los que se tiraban al suelo de las rabietas, se subian a todos los cochecitos de monedas, los castigaban en el patio por pegar a sus compañeros…. Su madre los miraba impasible mientras yo me escondia donde podía para que no viesen que iba con ellos. Un día hasta se lo solté: vaya cuajo que tienes, bonita….
Me miró suspirando.Anda, llevatelos un ratito…. Y veras. Jo si vi… en una hora se pegaron con dos niños en el parque, desmontaron una estantería de pelotas en un todo a cien, les tuve que pagar un cacaolat a cada uno, uno de ellos se enfado, se clavó en el suelo y tuve que llevarlo a su casa en brazos… cuando volví le dije: Ahora te entiendo
Y es que si no desarrollas una especie de halo de santidad y calma que ni el dalai lama…te vuelven loca…que es lo que hicieron esa tarde los joios niños…
Después de aquella tarde decidi ligarme las trompas voluntariamente..pero mis amigas me dijeron que sin tener hijos no te lo hacen….. curiosa paradoja…
Banda sonora de esta nota: Esos locos bajitos de Serrat
5.9.06
A por ellas....
Supongo que es ser más que cansina poner esta foto, pero decidme que cuesta mucho resistirse a la alegria que muestran estos hombres por televisión y por toda la prensa nacional. Un oro. Los mejores del mundo. Es un regalo del que disfrutamos todos los aficionados al baloncesto. Vale, digamos que la final no estuvo emocionante como el partido contra Argentina. Si llega a ser asi creo que en mi casa a más de uno le hubiese dado un infarto. Pero aquí están de vuelta, todos cantando, la gente más aficionada que nunca, candidatos al Príncipe de Asturias incluso he leído por ahi.... la verdad que sería un premio a un deporte eterno segundón que, por lo que a mi respecta, es el único que soy capaz de seguir sentada y el único en el que he hecho algunos pinitos hace muuuuchos muuuuchos años.
Oigo en las noticias recién levantada de mi turno nocturno de trabajo que la selección española de fútbol se ha trasladado a concentrarse a la misma Irlanda, "huyendo de las comparaciones con el baloncesto" (cito textualmente al comentarista de noticias de A3, que son las únicas que aún siguen cuando me levanto). Bueno, comparaciones aparte, aún sigo preocupada por no saber qué es un fuera de juego. Si, problablemente soy extraterrestre o mis padres me encontraron dentro de una coliflor. Cualquier teoría es válida.
Pero creo que hay comparaciones que van a marcar más. Por que este año hay mundiales de baloncesto femenino también. En Brasil. Nuestra selección esta allí desde hoy mismo, para jugar unos amistosos antes del torneo definitivo. Y este oro de los chicos es el gran desafio. Es un handicap o un motivo de estrés o una motivación, vete tú a saber. Solo quiero decir a los que disfruten con este deporte que las niñas también existen, que tienen un palmarés bastante bueno también y jugadoras a las que da infinita envidia ver en la cancha, como la incombustible Amaya Valdemoro, o Marta Fernández, ahora más conocida como "la hermana de....", Laia Palau o la veterana con récord histórico Marina Ferragut, con 34 años y 253 partidos internacionales.. Quiero decir que también ofrecen baloncesto de calidad, para emocionarse y vivirlo, y que merece la pena verlo si se tiene oportunidad, aunque no vistan como las jugadoras brasileñas de fútbol playa.
Así que desde aquí me gustaria desearles mucha suerte, por que currarselo seguro que se lo han currado mucho. Y si no traeis medalla, pues como que da igual. Simplemente se trata de hacernos disfrutar....
Más información en http://www.feb.es/DesktopDefault.aspx?tabindex=13&tabid=23
Banda sonora de esta nota: First we take Manhattan de Leonard Cohen.
4.9.06
Vacaciones de mi misma
Supongo que el considerarse estudiante ha de marcar de alguna de las maneras. Digo supongo porque para mí el ciclo nuevo anual viene dado no por el fin de año, si no por mediados de septiembre. Este mes maldito, por los gastos, por lo difícil que resulta reajustarse a una rutina casi anual, esa famosa depresión post vacaciones, y empezar a sacar las chaquetitas del armario… Añádele a esto que este mes cumplo un año más. El día quince, concretamente. Si nací el día que tradicionalmente empieza el cole, ¡por favor!
El mecanismo mental es muy parecido al de fin de año, por supuesto. Hacerse promesas que no cumplirás, pero que no importa porque nadie es más indulgente contigo que tu mismo. Pensar que estás viva otro año, pero necesitas vivir si cabe más ese período de tiempo, más intensamente, como si la intensidad se ganase con los años o con las experiencias vitales. Mirarte al espejo y pensar que hace diez años tendrías que haber empezado con los liposomas para evitar que esos radicales libres de los que tanto hablan en los anuncios de cosmética te ataquen como si fuesen pedradas. Pensar seriamente en cortarte el pelo cortísimo, buscarte tres amantes, tener un título de inglés o de chino mandarín, o intentar este año por fin si cambiarte el coche por que sí, como lo hacen el resto de las personas del mundo mundial, no porque te lo hayan estrellado o el motor haya muerto sin remedio.
Así que he intentado prepararme para un cambio este mismo mes de agosto, haciendo vacaciones de mi misma. Aún no sé en que consiste semejante experimento. Se que he intentado hacer lo que no haría por sistema y, por suerte y por desgracia, no ha funcionado. Aparte de que he tenido que hacer de ama de casa, he seguido teniendo los mismos parámetros mentales que siempre. Sólo que mucho mas agotada. He intentado convertirme en una adicta a la tele, una playera impenitente, una perfecta maruja…. Y he seguido leyendo con el ansia que espero nunca perder, rascando durante horas la barriga a mi perra, conduciendo como siempre sin querer saber dónde ir, y ordenando todo con una minuciosidad de enferma, para desordenarlo horas después…..
¿Conclusión? Tampoco soy tan mala como soy. Así de simple. Sólo quiero llevar la contraria a la gente y no hacer lo que me corresponde por etapas vitales. Soy acumulativa por naturaleza: de trastos y de pensamientos y de actos. Y como dice la canción “vuelvo a las andadas”…..”Y si me paras los pies, me salen alas”.
Por que puede que si intentas perderte de ti misma te vuelvas a encontrar. Y puede que si te esfuerzas mucho en encontrarte a ti misma, al fin y al cabo no encuentres nada.
He vuelto.
Banda sonora de esta nota: Vuelvo a las andadas de Estopa
El mecanismo mental es muy parecido al de fin de año, por supuesto. Hacerse promesas que no cumplirás, pero que no importa porque nadie es más indulgente contigo que tu mismo. Pensar que estás viva otro año, pero necesitas vivir si cabe más ese período de tiempo, más intensamente, como si la intensidad se ganase con los años o con las experiencias vitales. Mirarte al espejo y pensar que hace diez años tendrías que haber empezado con los liposomas para evitar que esos radicales libres de los que tanto hablan en los anuncios de cosmética te ataquen como si fuesen pedradas. Pensar seriamente en cortarte el pelo cortísimo, buscarte tres amantes, tener un título de inglés o de chino mandarín, o intentar este año por fin si cambiarte el coche por que sí, como lo hacen el resto de las personas del mundo mundial, no porque te lo hayan estrellado o el motor haya muerto sin remedio.
Así que he intentado prepararme para un cambio este mismo mes de agosto, haciendo vacaciones de mi misma. Aún no sé en que consiste semejante experimento. Se que he intentado hacer lo que no haría por sistema y, por suerte y por desgracia, no ha funcionado. Aparte de que he tenido que hacer de ama de casa, he seguido teniendo los mismos parámetros mentales que siempre. Sólo que mucho mas agotada. He intentado convertirme en una adicta a la tele, una playera impenitente, una perfecta maruja…. Y he seguido leyendo con el ansia que espero nunca perder, rascando durante horas la barriga a mi perra, conduciendo como siempre sin querer saber dónde ir, y ordenando todo con una minuciosidad de enferma, para desordenarlo horas después…..
¿Conclusión? Tampoco soy tan mala como soy. Así de simple. Sólo quiero llevar la contraria a la gente y no hacer lo que me corresponde por etapas vitales. Soy acumulativa por naturaleza: de trastos y de pensamientos y de actos. Y como dice la canción “vuelvo a las andadas”…..”Y si me paras los pies, me salen alas”.
Por que puede que si intentas perderte de ti misma te vuelvas a encontrar. Y puede que si te esfuerzas mucho en encontrarte a ti misma, al fin y al cabo no encuentres nada.
He vuelto.
Banda sonora de esta nota: Vuelvo a las andadas de Estopa