18.6.06

Mi barrio

Las mañanas en mi calle son tranquilas, con unaz serenidad que confunde a veces, nada que ver con esas tardes de coches en doble fila comapartiendo su música con la parroquia, los abuelos en el banco, esa familia medio paya que ocuypa la otra fila de bancos posibles, los niños jugando a pelota en la pista, los perros marcando territorio mientras sus dueños se hacen los despistados, esas señoras charlando en medio de la acera que nunca se apartan, la terraza del bar llena, las guineanas con sus niños y esos vestidos de batik que tanta alegría da ver en invierno, o las marroquis fashion que llevan el chador a juego con la ropa o con el bolso....


A las seis de la mañana la historia es totalmente diferente. El parque está desierto. De vez en cuando hay un hombre joven durmiendo en el banco, sin zapatos y con la mochila de almohada. Vienen a buscarlo y acaba su siesta matutina de golpe. Sólo se oye a la colonia de cotorras que desde hace años ocupó la palmera que está delante de mi balcón. Alquien más madrugador que yo ya ha extendido migas de pan por todo el suelo y los gorriones bajan a su cita obligada. Se empieza a reunir la cuadrilla de albañiles que cada mañana recogen en la puerta de la tienda de muebles. Todos van con sus jaulas de pajarillos uniformemente vestidas con una funda a cuadritos azules. Son todo gente joven y hace sonreir esa afición y hasta choca...
La panaderia es la única tienda abierta desde las cinco y media. Los habituales van haciendo la ronda hacia la puerta: los que acaban de plegar del trabajo a por el pan, ese abuelo que recoge a cinco nietos de tres lugares distintos,con su bocadillo hecho, y los reparte por tres colegios distintos también, la señora Isabel acompañando a su marido, con un recién diagnosticado Alzheimer, para que no se pierda por el camino. Yo sigo a mi perra en su labor diaria de remarcar cada día desde hace trece años su territorio, con la bolsa de plástico en mano. Pasa la municipal recordándome mis deberes civicos de dueña de perra, les enseño las bolsas y siguen su camino, mientras yo mascullo algo sobre el camello del parque interior de la esquina. A ese seguro que no le llaman la atención.
Y por un momento, sola en le parque, mirando de reojo a mi bichito, con el último cigarro antes de dormir aspirado intensamente, y las cotorras de banda sonora, me convenzo que este barrio es un buen sitio para vivir, cojo aire con fuerza y me empapo de esa calma matinal y me relajo lo suficiente para volverme a mi casa. Y no renegaría de esta calle de extrarradio, obrera, gárrula y un pelín canalla a veces, con todas sus historias y toda su gente..

17.6.06

Nacionalismos.

Alcalá de Ebro (Zaragoza) visto desde lejos....

Mucho se ha hablado de patrias, de paises, de estados y de naciones. Hay mucha literatura al respecto. Un poeta catalán dijo una vez que la patria de uno es donde tiene enterrados a sus muertos. Pero alguien escribió en su día que la patria de uno es donde tiene su infancia.

Por todos esos agostos. Por esas excursiones en bicicleta, por el columpio que mi abuelo nos descolgaba cada verano del techo de su taller de ebanisteria, por esos baños en el Ebro, pisando las piedras con la piel oliendo a verdín, ese inconfundible aroma de río que reconocería en cada instante, por la rapiña de peras del árbol, las trenzas que le haciamos a las panochas de maiz, por mojarme los pies en la acequia o intentar abrir las tajaderas, esas batallas de indios y vaqueros con mis primos y los vecinos ( yo siempre hacia de india)con esos arcos que nos fabricó mi padre, salvar a los caracoles del arroz del domingo, esperar impaciente a que acabase la misa de a doce para ir a comprar chucherias a la Celestina, los perros perdigueros de mi tio abuelo Marcelino, la escalera del depósito de agua (como se daba a los desafíos esa escalera) o ir a tirarles piedras a los del pueblo de al lado....

Por eso y por muchas otras cosas ese pueblo siempre será mi patria chica..o chiquitica...

Banda sonora de esta nota: Sueños de Diego Torres

12.6.06

¿Una peli mala?


Siempre que recomiendo una película es porque me ha gustado. O no me ha dejado indiferente que no es lo mismo. Pero la que ví ayer me aburrió soberanamente. A mí y al resto de la sala que estábamos allí, que no éramos muchos.
Sean Penn es un señor actor. Pero es que me viene a mi ultimamente pensamientos de lo bien que hubiese estado de protagonista de Forrest Gump. Por que el personaje que interpreta, según las críticas, es el de un perdedor del sueño americano este famoso (no sé qué harían los directores de cine americano sin el tema del sueño idem). Pero claro, su lucha contra el sistema le lleva directamente hacia la locura. Y vaya ida que le da al pobre. Por que, como indica el título, no le da por otra cosa que intentar asesinar a Nixon. Mira encima que trabajo inútil porque Nixon ya se estozoló solo (estozolar: vocablo maño donde los haya).
En fin, lo que me resulta curioso es que, cuando una película es aburrida, la gente reacciona de diferentes y variadas maneras. Conforme iba avanzando el metraje y aumentando la chaladura del personaje, mi compañero de butaca iba repitiendo...
_ Ostia, que mal que está este tio....
_ Este tio está payá.....
_ Jo que ida tiene este tío....
A mí me estaba entrando ya la risa floja..... los de los bancos de delante estaban jugando a pasarse cosas con los moviles por blutut de ese, dos parejas directamente se habían ido. Cuando el prota va a la sede de su pueblo de los Panteras Negras a proponerles una asociación de blancos y negros llamados Las Cebras, mi compi de butaca salta en voz normal....
_ Madre mía, para darle dos yoyas.....
Los veinte de la sala les entra la risa a la vez... los de delante se giran y comentan.. si que está mal de la cabeza el notas eh!! (para que se vea que nivel tenemos los criticos de cine independiente americano)... pasan diez minutos más y se me ocurre decir:
_ Oye...la peli la elegistes tú ¿verdad?
Me da dos collejas mientras empezamos a reirnos con la risa floja. Era imposible parar. Toda la sala nos miraba (los que no miraban el reloj, claro). Y yo que con toda mi voluntad había elegido la película porque, efectivamente, ese domingo me tocaba elegir a mí... que yo quería ver X Men III!!!! Y por ahorrarle la mandanga de tener que adivinar explicaciones mutantes... yo, que fui a ver Misión Imposible III sin haber visto las dos primeras....
_ Oche, oche...¿cuánto falta?
_ Cinco minutos....
_ ¿Hace un Dönner Kebab en el palestino del pueblo de al lado?
_ ¡¡¡Ya tardamos!!!
Y mientras se acababan las aventuras y desventuras del señor de la peli, antes de que se encendiesen las luces, salimos disparados del cine.
Banda sonora de esta nota: Eye of the sky de Alan Parsons Project

11.6.06

Dietas

Estar a regimen es antisocial.

Es una declaración altamente filosófica. Pero es cierta. Sólamente prueba a tomarte la verdura hervida mientras el resto de la familia se la ha salteado con jamón. Sólo con esa mínima diferencia ya acabas sintiendote como una excluida, una paria y una friki de las de televisión.
Todo comienza cuando sacas la ropa de veranito. Es cierto. Cuando empiezas a quitarte capas de tela. Y resulta que tu diámetro no es resultado de ese plumón guateado que compraste en ese gran almacén de ropa deportiva en el que va todo el mundo menos los deportistas. Que te surjen unas lorzas laterales que habías obviado durante algunos meses. Con el efecto invernadero cada vez menos meses, la verdad. Que estiras los brazos en cruz y pareces Batman antes de tirarse por el bloque de pisos para bajo. Que tu culo parece un flan y está tan alejado de las que bailan en los carnavales como Madrid de Lima
.
Vamos, que estás a años luz del canon occidental. Y lo estarás siempre porque cuando toda tu familia es como un armario ropero, las posibilidades de pertenecer a ese canon se dividen entre cien. Pero todo es intentarlo. Así que con toda la buena voluntad del mundo, te pones a regimen. Y cuando te pones a regimen intentas tener el mayor apoyo posible...así que vas insinuándole a tu madre y a tus hermanas que han cogido unos quilitos de más, que vaya michelín le sale con esa camiseta. Con mi padre y mi hermana peti no funciona la cosa. Mi padre mide 1'80 y nunca ha pasado de los 80 quilos. No le deja el cardiólogo. La peque hace muuuucho deporte; tanto que hasta le pagan por ello. Es de esos bichos raros que sale cada mañana a correr y encima te la encuentras estirada en un banco haciendo abdominales a la vista de todos mientras tu paseas a la perra por el poco trocito de campo al lado de una riera asquerosa y una autopista que nos ha dejado nuestro respetuoso ayuntamiento. Si no fuese mi hermana le daría una patada en el tobillo así como quien no quiere la cosa.

Con la dieta viene también la mayor de las voluntades de hacer deporte. Claro, de que te sirve perder quilos si luego tu cuerpo se queda como la gelatina royal. Así que comienzas a caminar por las tardes por el antes nombrado trocito de campo. Te adelanta un corredor seguido de un perro grandote al que parece que no le cuesta gran esfuerzo seguir a su amo. Aceleras el paso. Adelantas a cuatro señoras armadas de deportivos y pantalones piratas que comentan las historias de Ana Rosa. Hinchas pecho, te relajas y te sientes orgullosa. Hasta que las señoras te vuelven a adelantar. Paseas por el pueblo buscando el único quilómetro de carril bici. Sacas y desempolvas tu vetusta bici de montaña. Te pones los pantalones cortos y arreas. Y te cruzas con ciclistas vestidos de extraterrestres, con esa especie de zapatos que parecen los chapines de la edad media, vestidos de unos colores increibles y con casco y gafas. Que más que para correr en bici parecen preparados para una guerra química. Y tú con tu chaleco del coche, los leds comprados en el Lidl y la cestita con la botella de agua. Mira, una hippi trasnochada a comprar el pan, pensarán mientras me adelantan la cuesta arriba. Menos mal que aun me queda la piscina cubierta municipal. Por que nadar al menos no te provoca esos calambres en la entrepierna y ese dolor de la grupa inferior que es el resultado de estar dos horas en la bici sin tener práctica ninguna ni suspensión en el sillín ni esos pantalones acolchados que me dijeron dos días después que existían para estos menesteres. Que poco "moerna" que soy.

Pero bueno...estas miserias no son nada comparables a cuando estás tranquilamente en la panaderia del barrio tomando un café, leyendo el períodico gratuito de turno y viene una de las parroquianas ....
_ Anda, ¿estás más delgada o me lo parece a mi?

_ Te lo parecerá a tí porque yo delgada no he estado nunca.... o sea que no puedo estarlo más.

_ Pero un par de quilitos has perdido...

_ Si, me faltan quince más.

_ Anda, Rebeca, cobrame el café de la Hirvia (mi nombre dicho con acento andaluz) y ponle también un croissan que le invito yo....

Y te la quedas mirando con los ojos entrecerrados...pensando mentalmente para no pronunciarlo... "casho puta"....

_ Rebeca..pero de jamón y queso eh! Que estoy a regimen.

Banda sonora de esta nota: Pa' mi guerrera de Huecco.

10.6.06

El tema de la primavera.... y del verano y del otoño y del invierno.,

Prototipo de mujer equipada para su jornada laboral.


Vamos a ser sinceras, a riesgo de que me llamen la atención. Por regla general odio trabajar con mujeres. Por muchas y varias razones. La principal es por el curioso sentido de la competitividad que tenemos. En un trabajo donde los hombres cobran tóxico, peligrosidad y penoso, nuestra gerencia nos sigue pagando como si no respirasemos en ese ambiente, nuestras manos no compartiesen un poquito el ácido con el que limpian nuestros instrumentos de trabajo, y como si las mascarillas de celulosa y los guantes de látex marca Acme nos protegiesen de todo mal. Digo yo que en esas circunstancias, al menos el penoso nos lo podrían pagar.

En cualquier circunstancia las mujeres somos muy arpías entre nosotras. Lo digo desde mi humilde experiencia de currita de fábrica. No quiero ni imaginar cómo pueden ser las cosas en una oficina, o en altos puestos ejecutivos.... allí después de las uñas deben afilar las katanas tal cual la Mamba Negra en Kill Bill.

No me quejaré de mis compañeras. Tanto tiempo compartiendo miserias, confidencias y turno noche dan ya hasta una especie de telepatía que te hace intuir cuando tienen problemas de pareja, están en números rojos o tienen la comunista en plan revolucionario... Las primeras horas de la noche sirven para comentar las noticias del parte, de ese agradable y optimista programa de la uno llamado Gente y de las recetas de Jose Andrés y las historias de la Patricia... mientras yo pongo verdes a las desordenadas del turno de tarde...

El caso es que la última compañera que ha entrado tiene un carácter un tanto especial. Supongo yo que no tengo carácter para medrar, por que algunos detalles me revientan. También supongo que cuando llevas un tiempo trabajando mediante ETT lo que quieres es hacer méritos para quedarte quieta un tiempecito en algún lado. Pero eso de querer hacerte notar echando mierda a los demás me parece un método rastrero y ruin. Y eso es lo que hace esta mujer. De hecho la ha tomado con la compañera que lleva sólo un mes menos que ella. Le corrige constantemente, le repasa la faena después de hecha, me chiva cuando ha hecho algo mal...

Ante esta actitud tengo varias y diversas opciones:


_ Explicarle que yo allí no soy encargada de nada. Vamos, que no puedo recomendarla. Para mayor inri, el jefe de taller me habla lo justo y necesario porque cada vez que hablamos salimos a la greña dentro de los límites de la educación que me caracteriza a mí. (a el no)

_ Dedicarme a hacerle a ella todo lo que hace a su compañera. A veces un poco de su medicina no hace daño al facultativo digo yo.

_ Esperarla a la salida y darle una paliza entre los camiones del aparcamiento entre las tres.

Espero, hipotetica/o lector/a tus sabios consejos.

Banda sonora de esta nota: Japón de Mecano.



9.6.06

El ciclista.

Estuvo un año trabajando con nosotras. Por esas miserias de la vida laboral, le hicieron la cama entre unos cuantos y un día el encargado lo echó por sorpresa. Para sorpresa nuestra y para sorpresa de él mismo. La verdad es que era del turno de tarde. Lo trasladaron momentáneamente por que tenian que enseñar a alguien para pasárnoslo a nosotras, pero a la semana pidió permiso y decidió quedarse en el turno más perjudicado de nuestra perjudicada empresa.

Era vasco de nacimiento e inmediatamente me cayó bien. Seguía siendo un chicarrón del norte aunque hiciese años que había recorrido media España y más años aun que se emparejó y tuvo una hija en la provincia de Barcelona. En la agencia de trabajo temporal decían que era el hippy oficial de la sucursal. Cuando tenía acumulado unos meses de paro, se despedía. El caso es que siempre lo volvían a colocar porque el tio curraba a conciencia y nadie había tenido quejas. De hecho, el año que estuvo con nosotras fue el tiempo que más duró en un puesto de trabajo, según nos comentaron.

Era tranquilo como una cosa mala. A mi personalmente me daban ganas de darle dos collejas. Eso si, sin inmutarse casi hacia su trabajo, le daba tiempo a leerse los periódicos atrasados que siempre campan por nuestra empresa, tirarle los tejos a mi compañera de control de calidad y venir a charlar conmigo de política, filosofías orientales, recetas de torrijas….nunca hubo un comentario directo sobre su vida privada… Poco a poco fuimos adivinando que vivia con su ex mujer y su hija, que acababa de romper con una relación casi clandestina por sus circunstancias, que no tenía teléfono móvil… Más de una vez le enganché mirandole el culo a mi compañera, con el consiguiente cachondeo…

.Pero sus confidencias se las hacía a la compañera con la que compartía tiempo de almuerzo. No negaré una sana envidia: me intrigaban sus silencios y esa tozudez en estar incomunicado, en no querer hacer amigos, y tengo que admitir que me resultaban bastante atractivos. Me pilló en una temporada bastante tonta y quizás el estar baja de defensas provoca ciertas cosas. Claro que, mirándolo de la manera más realista posible, si andaba tirándole los tejos a una compañera que sigue estrechándose las batas para marcar cintura, viene perfectamente maquillada y engominada al trabajo, y está convencida que media plantilla le tira los tejos, a los cinco días me di cuenta de que una empollon miope como yo no tenía nada que hacer. Algún día algún hombre me tendría que explicar por qué a los hombre más inquietos les suelen atraer las mujeres más superficiales. El día que le encuentre sentido a alguna de estas explicaciones habré resuelto muchas dudas de mi vida.

Una semana antes de que lo echasen, fue mi cumpleaños. No sé cómo lo supo, ni cómo se le ocurriría la idea. Se que el mismo día tal cual dieron las doce de la noche, se plantó delante de mi mesa, rojo como un tomate, y me dio una bolsa de plástico de El Tajo Anglosajon atada con un nudo. Y salió disparado susurrando un “felicidades”. No negaré que me hizo mucha gracia ver a un hombre de 42 tacos en esa tesitura. Abrí la bolsa allí me encontré un libro: el Tao te kin de Lao Tse. Puede que sea el regalo típico de una persona que había recorrido la India de mochilero. Que hacía magdalenas con maría y que había renunciado a su carnet de conducir para ir a todos lados en bicicleta. Pero a mí me pilló tan de sorpresa que salí a perseguirlo, le dí dos besos y le pedí una dedicatoria….

_”¿Sabes, Silvia?_ me contestó_ hay libros a los que no merece la pena añadirle nada más, y hay cosas que se han de escribir desde una perspectiva de tiempo.

_ O sea que no me lo vas a dedicar……

Y no me lo dedicó. Y lo echaron y ni siquiera fue para volver una noche a vernos, como hace todo el mundo que ha estado en el turno nocturno con nosotras….de eso hace casi un año y medio. Hoy he salido a tirar la basura y me lo he encontrado, con su bicicleta, en el quicio de la puerta. Me ha hecho una ilusión tremenda, nos hemos dado un abrazo, me ha preguntado por todo el mundo y me ha dicho que está currando en la empresa de enfrente…. Que vendría a vernos otro día. Sigue sin tener móvil y sin querer quedar a hacer un café o unas cervezas….me supongo.

_”Eres un impresentable”_ le he dicho_ mira que dejar a quí a tus niñas abandonadas y sin noticias….

_ Pensé en dejar pasar un poco el tiempo… por cierto..tienes papel y boli? Apunta…. 619….


Banda sonora de esta nota: 20 de abril de Celtas Cortos.

7.6.06

Zapatofilia y bolsomania.

En una casa con cuatro mujeres, la ropa, los bolsos y los zapatos son como la energía: ni se crean ni se destruyen...simplemente van cambiando de dueña. Que la pequeñaja hace órden de camisetas de tirantes; allí está mi hermana mediana esperando con sitio en el armario. Que este verano las chanclas de dedo me matan; allí tengo a mi hermana y a mi madre dispuestas a acogerlas.

Creo que debe ser una costumbre ancestral, heredera de las familias de clase media baja o algo así, en la que mi hermana y yo heredábamos la ropa de mis primas, .... no se si antes la ropa era de mejor calidad o nos cundía más..por que luego nuestra ropa iba a nuestras primas más pequeñas.... hasta que llegó la adolescencia, nos igualamos o hasta nos superamos en talla, número de zapatos y nos diferenciamos en gustos: mientras mi hermana y mis primas se hacían heavys, yo iba de normal tirando a anónima a ser posible por mis fueros.
Claro que hay cosas que son curiosas. Mi cuñao dice que en esta familia nuestra tenemos una grave enfermedad llamada complementomanía. Esto se traduce en una acumulación que en un futuro podría ser una enfermedad derivada del síndrome de Diógenes de zapatos y bolsos. Y va en aumento desde que en los bazares chinos, que crecen como setas en mi pueblo, los bolsos son tan baratitos. No me extraña: rótulo gratis si lo haces completamente en catalán, y cinco años libres de impuestos. Cuando acabas el plazo le pasas el negocio a tu primo segundo el Yet Li, sigues trabajando en la tienda y listos..hasta que le toque el turno al Yaki chan, al Brus Li o a Remedios Conichigua....así toda la familia currando hasta la jubilación....


Así que el otro día, mi padre, aprovechando la coyuntura, o sea, la hora de la comida el sábado, nos soltó a bocajarro....
_ Silvia, ¿has visto cómo tienes la estanteria del armario? Eso está plagado.... además tienes casi como cinco pares de deportivos.... Y tu, mama, tienes nada más y nada menos que veinte bolsos... a ver si vais haciendo órden y tirando algo....


(Que conste aquí en acta que mis padres tienen la ñoña costumbre de llamarse entre ellos mama y papa..podría ser peor y llamarse churri o cosas asi.... mi amigo me llama pocholina, pero esto tiene una explicación cinéfila eh! Quien la acierte le doy de premio unas chanclas de dedo del número 41)

_ Anda 20 na menos... ¿y tú como lo sabes?_ le casca mi hermana mediana.....
_ Pues por que los he contado..... y te los he ordenado...


Nos hemos quedado un tanto estupefactas.... así que le soltamos que los bolsos han de ir a juego con los zapatos y con la ropa.... a lo que arguye que por que entonces hay tres bolsos rojos en el armario de mi madre, dos verdes lima en el de mi hermana y por que cuatro bolsos negros en el mío. Le contraatacamos con la conjetura del tamaño...bolsos del mismo color, diferentes tamaños según utilidad... sigue arguyendo que con tres bolsos hay más que suficiente..le sigue sobrando uno... aprovechando para soltar que la mayoria de los zapatos de la casa son marrones o negros.... a un maño de horóscopo Capricornio resulta difícil discutirle; es algo así como el colmo de la tozudería. Desistimos y esa misma tarde nos ponemos a ordenar....
_ Eh, eh Middle Sister, (hablando en susurros) ¿quieres unas chanclas de dedo?..es que me las compré el verano pasado y me da palo tirarlas.....
_ Que rulen Senior Sister.... ¿ y tú un bolso azul azafata?
_ ¿Qué andais repartiendo por ahi?... las chanclas azules para mí eh_ (esa es mi madre).
El caso es que al final no tiramos nada...todo fue de un cuarto a otro... Y varios días después, a las siete de la mañana, yo ya estaba intentando colar de strangis en casa un par de alpargatas de esparto aprovechando que el jefe de la tribu estaba aún dormido... asoma mi hermana la cabeza por la puerta de su cuarto y me hace un "pss pss"...entro en su cuarto sigilosamente cierra la puerta y me lo enseña.....
_ ¡¡¡¡¡¡Uala, un bolso de la Pantera Rosa!!!!!! ¡¡¡¡¡Que caña!!! Dámelo, dámelo, dámelo........
_ Si hombre que me ha costado quince leuros..... ummmm.... te lo cambio por tus sandalias Via Uno y tu bolso rosa de la Pantera Rosa....
_ Pos fale.... espera que voy a buscarlos....
Y todo esto a media voz... guardando el bolso debajo de la chaqueta...cual si fuesemos camellas... escondo el bolso en mi cuarto y salgo al comedor. Mi madre está lista para ir a currar.
_ Hola mama. ¡Que guaspa vas hoy! ¿Y ese bolso blanco?¿De dónde ha salido?
_ Pssssssssssssssssssss.... me dice medio riéndose... mientras de reojo veo a mi padre que sale de su habitación con los ojos pegados aún .
Banda sonora de esta nota: Rescue me de Bell, Book and Candle

4.6.06

Jose Carlos Somoza


Una no es que sea el colmo de la intelectualidad, para que vamos a engañarnos. Ni ganas de serlo. Pero a veces echas de menos leer algo rápido, fácil, pero que se note que el autor tiene como mínimo algo de imaginación.
Por eso me gustaría hoy presentaros a un autor que hace gala de una gran imaginación, un sentido del ritmo trepidante sin perder calidad literaria. Su nombre es Jose Carlos Somoza y podeis encontrar reseñas de sus obras y una breve bibliografía en www.lecturalia.com. Yo no me las he leído todas, pero las cuatro que me he tragado me han resultado de gran calidad sin dejar de ser de las que no puedas dejar de leer.
La primera que me leí fue La caverna de las ideas. En la Grecia de la Academia de Platón, Heracles Pontor, descifrador de enigmas, se enfrenta a una serie de asesinatos de jóvenes atenienses bastante crueles. Pero esto está narrado como un enigma que pone de relieve los problemas de la traducción.
En La dama número 13 el punto de partida es realmente inquietante. Existen versos escritos que, pronunciados de alguna manera, tienen realmente poderes extraordinarios. Existen desde siempre doce mujeres que pueden realmente utilizar estos poderes...o quizás trece. Una teoria realmente sorprendente ¿no? Donde pesadillas y versos comparten protagonismo.
Clara y la penumbra es también un best seller por su ritmo acompañado de una teoría totalmente inventada aunque no totalmente increible sobre el arte y la pintura. En un hipotético año 2006, lo más in del arte es la pintura llamada hiperdramática, donde lienzos humanos son expuestos y vendidos. Los asesinatos de manera muy retorcida de estos lienzos hace que se ponga en marcha una investigación contra reloj, mientras la protagonista, Clara, ajena a esto, se prepara para ser el lienzo estrella de la exposición del fundador de esta corriente.
El último libro publicado de este hombre es Zig Zag. No diré que es el que menos me ha gustado, pero si el que me ha costado más entender, pero por que me cuesta horrores centrarme en lenguaje científico. Una suspendió las mates de segundo y no las recuperó hasta el COU, con eso queda dicho todo. Una profe universitaria de física teórica se ve envuelta en una persecución por parte de una multinacional, por un lado, y por otro de un enemigo todopoderoso que está relacionado con una serie de experimentos en los que participó hace años, experimentos destinados a intentar "cortar" porciones de tiempo pasado.
Hasta aquí lo que puedo recomendar. Y lo hago con entusiasmo. Por que este autor tiene la facultad de engancharte desde la primera página. Sin dejar de admirar la prodigiosa imaginación de este hombre.
Banda sonora de esta nota: Take me out de Franz Ferdinand.

3.6.06

Inquietante.....

4.- CONCLUSIONES

Reconocimiento médico anormal con niveles excesivamente altos de glucemia que debe controlar. Tiene que acudir a su médico de cabecera y aportarnos informe sobre su seguimiento y último análisis de control. Aconsejamos abandonar el hábito tabáquico. No la podemos considerar apta para su puesto de trabajo hasta que no se evidencie un adecuado control de su diabetes.

5.- GRADO DE APTITUD

No apto.




Esto no sé ni cómo encararlo: en una mútua laboral no me consideran apta para estar en mi puesto de trabajo. Pensaba que no leería una cosa así en mi vida. El martes pido hora de urgencias ya.... estoy muy inquieta.


Banda sonora de esta nota: Oiga doctor de Sabina

2.6.06

Consulta al aire

¿Alguien podría explicarme por qué razón el espacio entre párrafos de lo que escribo nunca se publica?

Estas notas mías son mortales de cara a la vista.... todo tan apretado.

¿Y cómo colgais canciones en el blog?

Misterios sin resolver jajajaa

Una historia de internet....

La verdad sea dicha, que me tuvo atareada hace un par de meses. Hacía años que no la veía y cuando la reencontré me explico sus azares y luchas. Estaba triste, atrapada en una relación de pareja casi biunívoca, temiendo decepcionarle, dedicada exclusivamente a una sola persona....
Intenté animarla, pese a la oposición de su pareja a compartirla con nadie que no fuese su círculo. Cafés por Cerdanyola, compras, etc.... Intenté que se abriese un poco sin moverse de casa y decidí enseñarle a moverse un poco por los chats. Le dí clases de messenger con la esperanza de que al igual encontrase a alguien afín, o al menos que la espavilase de la mejor de las maneras. Pasaba horas en mi casa mientras yo leía tumbada en la cama y le explicaba. Incluso llegué a dejarle una tarjeta SIM de móvil.
Hace un mes volví a perderle la pista. La verdad es que no soy de las que suele insistir...pensé que su vida estaba más tranquila, más cuando me dijo que se iba una temporadita a Huesca con la familia aprovechando unos meses de subsidio de desempleo acumulado. Para refrescarse las ideas dijo.... para huir, pensé yo. Y volvió a desaparecer. La ausencia de noticias siempre son buenas noticias ¿no?.
Esta semana recibí llamada suya. Me dijo que había bajado para acá. Quedamos inmediatamente para cenar. Me explicó que había encontrado allí trabajo y quizá nueva pareja. Tiempo al tiempo. Pero me dejó helada cuando me regaló su teléfono móvil. Y comentando divertida me explicó que:
_ Habia entrado repetidas veces en mi messenger y hablado con mis contactos.
_ Que durante esas conversaciones no se había molestado en aclarar que yo no era yo, que era ella.
_ Que había usado el nick que tengo registrado en irc hispano.
_ Que a la gente que había conocido le había dado MI dirección de messenger.
_ Que para no dar muchos datos, a esos conocidos les había dicho que se llamaba Silvia, que era licenciada en letras y que vivía y trabajaba en un pueblo del Vallès Occidental.
Vamos, que cómo no andaba muy sobrada de imaginación, ella se había hecho pasar por mi misma con alguna adaptación particular. Que había conocido gente muy maja y que por favor, si algún día abría el messenger con esa dirección, que lo explicase y me disculpase en su nombre. No sé qué cara se me debió quedar en ese momento. Seguro que si me dan un susto me hubiese quedado con un ojo guiñado y la boca abierta. Sólo me salió un "ostia que gracia" tan agrio que puso cara de confundida esperando supongo que le dijese algo así como "aisss que cosas tienessssssssss monah". Me despedí en cuanto pude y hoy por la mañana abro el messenger con un ataque de nervios.
Y cuál es mi sorpresa cuando me veo una dirección que tengo repe en mi otro correo. Miro la agenda del teléfono por pura intuición. Y veo un número bastante conocido.
Ahora que alguien me explique, por favor, cómo le explico el embolado a esta persona.....
Banda sonora de esta nota: Hold me now de Thompson Twins.

1.6.06

El zoo de Silviqui y familia: Monchito y Browni


Os presento a Monchito y Browni. Son los últimos fichajes de la casa. En realidad son de mi hermana peque, la menor de las tres y la única que está emancipada. Y vienen a casa a pasar las vacaciones. Son dos hurones machos que no llegan al año y llevan por aquí dos semanitas exactamente.
Monchito es el mayor. En agosto hará un año. Es el albino. Ya había estado en casa antes o sea que ya estaba acostumbrado al trasiego de bichos que hay por aquí. Cuando mi hermana se fue a su casa hace hoy una semana me dejó una mochila entera cargadita de champú, desodorante para hurones (si...es cierto), dos paquetes de comida para gatos jovencitos, dos arneses y una hamaca de recambio. Estos bichos duermen en hamacas, como los del anuncio de "me estás estresaaaando". Me dijo sobretodo que evitase bañarles, que les sacase a pasear cada día para que se cansen y casi la escuchaba decir que no les diese de comer después de medianoche...pero afortunadamente no lo hizo.
De vez en cuando los sacamos de la jaula...bueno casi siempre. Pero resulta que son hiperactivos. A mi perra la tienen frita desde el primer día. En cuanto la ven andando le van a morder. Cuando los sacamos tenemos que esconder también a la pobre tortuga. En cuanto la encuentran la cojen en la boca y se la llevan a esconder debajo de donde puedan. El domingo por la noche, mientras yo veia inocentemente Aida, se tiraron un rato peleandose por ella. El caso es que estos bichos ven menos que un gato de escayola, y en cuanto intuyen algo moverse van directos a por ello. Vamos que c.....s no les faltan a pesar de estar castrados. El único listo es el gato persa: en cuanto los ve salir de la jaula se sienta en el lugar más alto que puede: encima de la pecera. La gata defiende su territorio a zarpazo limpio y a soplidos, por que con lo pequeñajos que son se suben al sofá que da gusto. O sea que ahora hay que ir vigilando dónde te sientas, no vaya a ser que haya un hurón suelto. Y encima vigila: mi hermana los dejó solos una tarde en su piso y le hicieron un tunel en la espuma del cojín del sofá. Ya está pensando en que modelo le va a comprar al dueño si se cambia de piso. Verídico.
Monchito tiene una curiosa particularidad. Y es que en cuanto oye la nevera abrirse lo tienes en los pies apoyado en las patas traseras haciendo de bicho bonito para que le des algo. Se come todo lo que pilla por el suelo, incluso los pétalos de los geranios de la terraza. En cambio lo de Browny es mas heavy. Le encanta bañarse y en cuanto abrimos la jaula sale disparado al lavadero y se baña en el agua del bebedero de los gatos y la perra. Aparte de comerse su comida. Los hemos pillado escalando por la jaula de los periquitos, hemos tenido que cerrar el desagüe de la terraza por que les cabía la cabeza por el sumidero del balcón, un día se coló el marrón por el pasillo y lo encontré con la cabeza metida en uno de los zapatos de mi madre.
Lo peor fue el día que se me ocurrió sacarlos a pasear al parque. Primero, porque en cien metros me pararon veinte personas a acariciarlos. Segundo, porque en cuanto tocaron suelo uno se fue para la izquierda y otro para la derecha. Y tercero, porque salieron corriendo tres niñas de unos diez años en un parque lleno de mamas con críos hasta la bandera, gritando como posesas "agggggggggg que ascooooooooo, rataaaaaaaaaaaas". Estos niños de extrarradio deben ser que sólo conciben a los pollos como salen de la rostiseria.
Monchito vino con un resfriado y el jueves pasado lo llevé al veterinario. Tiene un principio de bronquitis y ha estado toda la semana medicándose. Me aconsejaron que le hiciese vaporizaciones y cuando mi hermana lo metió en el lavabo para ducharse, tiró la escobilla y se cayó dentro de la taza del váter. Ya casi no tose, pero hoy lo llevaré de nuevo al Hospital Clínico Veterinario de la Universidad, sección Exóticos. Salí de allí con una receta, una caja de antiinflamatorio veterinario y casi noventa euros menos. Cuando le dije al veterinario que convivía con otro hurón, dos gatos, una perra, veinte periquitos, dos canarios, un jilguero, una tortuga, dos ranas del Amazonas y una pecera de agua caliente, se me quedaron mirando fijos él y las siete estudiantes de prácticas que estaban intentando meter a mi bicho el termómetro en el culo sin que les mordiese, y me dijo impasible....
_ Entonces no tengo que explicarte cómo darle medicinas... ah, y el jueves que viene traelo en ayunas que le haremos pruebas de alergia....
Lo que me faltaba: un hurón alérgico a los animales y otra clavada en euros.... Ya sólo nos falta el corral.
Banda sonora de esta nota: Wake me up before you go go de Wham!