28.2.06

Señor, dame paciencia para sobrevivir a mi trabajo

El viernes pasado por la mañana me llama mi encargado. Nuestras relaciones son especialmente tensas desde que me dijo que era una mala persona por reclamar que un día que nos hicieron quedar en casa fuese considerado como fuerza mayor, ya que fue por avería de la maquinaria principal. La verdad es que le contesté que ser una mala persona era atracar a un vendedor de la ONCE, y no pedir lo que era nuestro.... y desde ese día no me daba ni los buenos días, valga la redundancia. Por eso cuando me llamó me dió mal rollo fijo....

_ Silvia, supongo que ya sabrás que tu compañero se va. El lunes empieza una chica nueva para que le vayais enseñando.

_ Perfecto ...... si el último día de mi compañero es el martes, dos días serán más que suficientes para enseñarla, si (con tono irónico por supuesto)

_ ¿Sabes quién vino a pedir trabajo? Esa chica que estuvo con vosotras de noche... Inma se llamaba

¡¡¡Yu hu, vuelve Inma!! Menos mal... de el tiempo que estuvo aquí nos hicimos amigas. Una tía cojonuda y además trabajadora como ninguna de las que ha estado conmigo....

_ Pero le he dicho que no había nada para ella... imagina que imagen...se ha rapado al cero... y esas camisetas que me lleva...

_ Perdona si me equivoco pero...esto es un turno de noche... y no estamos seleccionando personal para Mango ¿no?....

A estas alturas me está subiendo ya la indignación y temo que me salga un cartel en la frente con los dos sustantivos y la preposición que le estoy asignando a este hombre. Sigo sonriendo siniestramente pero él sigue a su rollo y yo no paro de mover un pie....

_ Si, pero..imagina que viene un cliente.... a veces vienen clientes de visita y ya se sabe..hay que dar imagen...

Manda huevos como dijo Trillo. Trabajamos en un taller en el que compartimos almuerzo con los ratones (y yo con mucho gusto) y la ventilacion la produce un vidrio roto del final de la nave. Y el tío me está hablando de imagen...

_ Perdona..pero tu actitud es un poco elitista....

Y doy media vuelta y me largo... lo siento no podía más ....

Hoy ha vuelto a aparecer. Me llama en un aparte. Me pregunta...que tal la chica nueva. La chica nueva es una señora que hace años que no trabaja de noche, que ya había estado de tarde y se había peleado con dos de las compañeras y que, no sabemos si es porque no había dormido siesta, va más bien tranquila... pero le daremos tiempo....

_ ¿La mujer nueva? Perfecta...tiene todos los pelos en la cabeza y no tiene más de una talla 42... puedes estar tranquilo....


Y da media vuelta, todo colorado, y se larga....

Creo que la historia continuará..... a ver si de esta me echan...


Banda sonora de esta nota: Eye of the sky de Alan Parsons Project









26.2.06

Mardito canon occidental....

Entro en una de esas megaperfumerias en las que hay de todo. Objetivo, comprar una crema de manos medianamente decente. Empiezo a curiosear:

_ ¿Puedo ayudarle en algo?

_ No, gracias...sólo estaba buscando una crema para las manos.

_ ¿ Me deja ver sus manos? Uiiiiii que resecas.... y estas durezas...necesita usted un tratamiento especial. Esas manos con Neutrogena no se salvan..

_ Pues si a los pescadores noruegos les sirve...

_ Usted trabaja con productos químicos

Esta vendedora debe ser vidente....

_ Si, ¿se nota mucho?

_ Efectivamente..esa piel y ese pelo y esas manos tan resecas...

Ahora es cuando empiezo a asustarme..o sea que todo mi cuerpo esta reseco.... me la miro con ojos de cordero degollado.... me empiezo a tocar el pelo. No lo habia notado hasta ahora pero, ahora que me lo dice, tiene un tacto parecido a la estopa... Y mis labios están siempre supercortados.. yo que pensaba que era uno de los síntomas del azúcar alta. Al menos eso me dijo la endocrina.

_ Pero mire, tengo aquí justo lo que necesita. Un lote de muestra de Isabel Arde con crema de manos, body milk e hidratante labial. Depende de lo que quiera gastarse, sale muy muy económico. Tenga en cuenta que son productos que tardan en gastarse. Y para el cutis un tratamiento para piel de ciudad, ya que los humos de los coches suelen ensuciar mucho los poros. Es altamente efectivo e hipoalergénico, porque además parece que su piel es sensible ¿no? Para ese pelo la nueva línea para pelo encrespado de Clinis iria ideal.

Y yo ya empiezo a verme a mi misma con el aspecto de uno de los zombis de 28 días después, con las escamas de mi piel cayéndose a cachitos, toda llena de rojeces como cuando descubro después de ducharme que ese body milk me da alergía (jo, estoy heredando con la edad la dermatitis crónica de mi padre) y casi que al mirarme al espejo de los muestrarios de maquillaje, me veo más bigote que el superintendente Vicente de Mortadelo y Filemón.

_ Claro que si usted estuviese más morena....

_ Es que los rayos uva me dan sarpullidos..y como llevo cinco años trabajando de noche...

_ Ya me extrañaba a mí..esas ojeras y esas bolsas no eran normales. Vamos a traer proximamente un producto de parafarmacia para reducir las bolsas..pero un poquito de maquillaje no le haría daño ninguno...

Eso me suelta la torda sonriendo, mientras yo ya estoy empezando a hundirme en una depresión fulminante. Con lo cual salgo de la tienda con el famoso lote, una mascarilla para el pelo, un exfoliante para los pies, un neceser de muestra con cremitas para la cara, una barra antiojeras, un bronceador sin sol, un bote de maquillaje para el cutis y un paquete de cera fría facial. Dos bolsas hasta los topes, casi cien euros menos y un tic nervioso que me impide mirarme en los escaparates, no me vaya a ver con mis ojeras de oso panda, mis pelos de loca y mis labios cortados y blancos.... y mientras voy para la granja a tomarme un café me digo a mi misma a media voz...

_ Silvia, tú estás gilipollas acabada.....

Banda sonora de esta nota: Puedes contar conmigo de La Oreja de VAn Gogh

"Cableada"

Ayer me dio por comentar, mientras veía en un bar el Barça- Zaragoza (he descubierto lo divertido que es ver fútbol en los bares con concurrencia masculina) mis problemas con el pelo con la chica que estaba en la barra. Bueno quien me conoce sabe que me peleé con el peine el infausto día que, con 18 tacos, decidí que estaba harta de llevarlo cortito y que me intentasen ligar las mujeres en el instituto. Por lo visto en los finales de los ochenta quien tenía el pelo corto era una pista para demostrar tu condición sexual. Yo era muy pero que muy pardilla entonces, pero en vista de las experiencias, eso es lo que entendí.

Al caso: tengo el pelo más rebelde del mundo mundial. Cuando llueve no se me riza, como a la mayoria de las personas con pelo ondulado. No: me salen tirabuzones. Como una versión morena de la niña repelente de La casa de la pradera. Y cada día cuando me levanto parezco la novia de Frankenstein. Ni Madge Simpsomp tiene los pelos tan tiesos recién levantada. Sobre todo, el flequillo, pero no tengo paciencia para dejármelo largo. No puedo imaginar que efectos paranormales podría producir siete horas de sueño en mi flequillo el doble de largo. Sólo de pensarlo me dan escalofríos.

Bueno, explicando mis problemas capilares estaba cuando uno de los camareros, estudiante de ingenieria, me suelta

_ ¿Eso sabes por qué es? Por que eres sensible a la contaminación electroestática.

Contaminación electroestática. Se debe, me dijo, a la cantidad de cables que tenemos enchufados por la casa. Me pregunta si tenemos muchos aparatos eléctricos en casa. Y me paro a pensar y sólo en el comedor, entre tele, deuvedé, home cinema, cacharro de TDT, lámpara de leer y el acuario ya tenemos una cantidad de enchufes bastante considerable. Microondas y tele en la cocina. Lámparas de leer en todas las habitaciones. Tres ordenadores... vamos, casi lo normal en estos tiempos. Sólo nos falta la lámparita con agua del bazar chino, la verdad.

Pero es que me paro a pensarlo y no hay un día del año en que no tenga algún cacharro recargándose en mi cuarto. Además lo hacen casi a diario. Cuando no es el ordenador, es uno de los dos móviles que tengo. Cuando no es la consola, es el cacharro del mp3. Y a veces, antes de salir de excursión, las dos baterías que tengo para la cámara de fotos. ¿Qué se ha hecho de las entrañables pilas? Creo que hace un año que compré dos paquetes de cada clase en una mega tienda de informática, y aún no las he gastado más que para los mandos a distancia.

Si esto de los pelos es a causa de esa contaminación electroestática, ya os voy recomendando encarecidamente desde aquí que hagais reserva de espuma, laca, gomina, cera y todo lo que se os ocurra de la drogueria, por que la cosa irá para más. Otro recurso socorrido es raparse al cero, pero aún no me lo he planteado. Es la solución más práctica, eso si. Mientras no provoque efecto pararrayos estaré relativamente tranquila, por supuesto.

Banda sonora de esta nota: Mi vida de Manu Chao

En defensa de los Best Sellers

Ya sé que no son horas para hacer un alegato. Pero son las siete casi de la mañana y, por desgracia, tengo dolor de muelas. Así que me sirve para entretenerme un rato a ver si el ibuprofeno me deja groggy.

Y es que una está un poquito harta de escuchar, a estas alturas todavía, críticas a El código Da Vinci. Parece que ahora, con el estreno casi inminente de la película, vuelve a provocar comentarios de gente sesuda cuyo libro de cabecera es el Ulisses de James Joyce. Por que a mí que me digan que un libro no gusta, me parece perfectamente respetable. Pero que las personas con conciencia crítica rechacen un libro sólo por qué se vende, pues ya me parece de una pedantería extrema. Vale, que el libro incurre en datos históricos garrafales. Pues sí... aunque esto lo sé de segunda mano. Ir buscando gazapos no es lo mío porque desde pequeña he padecido una falta de concentración como que muy bestia.

Pero es que hay cierto tipo de libros que se supone que han de ser puro entretenimiento. Y no podemos por que cumpla esa premisa, rechazarlos de plano. Por lo mismo que no podemos , a menos que sea muy evidente, calibrar la mala calidad de una novela histórica por los fallos que cometa. Por que para escribir una cosa así hace falta un trabajo de documentación tan exhaustivo que yo sólo empezar a leer una ya admiro al autor. Seguro que se ha pasado el doble o el triple del tiempo documentandose que escribiendo. E igual se le ha podido escapar alguna, pues claro que si. Pero una novela digamos que de detectives monacales en la edad media es, al fin y al cabo, una novela negra, y es en los parámetros del género que pretende quizás subvertir al no localizarla en el siglo veinte o veintiuno donde se ha de buscar.

Y es que esta actitud en contra de los best sellers siempre me ha fastidiado. Esa mirada irónica o por encima del hombro de algunos/as compañeros/as de facultad que te lanzaban cuando te veian paseando hacia el autobús con el mortadelo o con alguna novela de Stephen King, cuando lo chic era forrarte la carpeta de poemas de Cirlot, o pasear alguna crónica postcolombina de Bernal Díaz del Castillo o A la recherche du temps perdu en su lengua original, por supuesto.

En el fondo, hay gente que no le gusta leer ficciones por muy de alto nivel que sean. Que no pueden vivir historias porque son incapaces de bucear en un libro sin estar buscándole los tres pies al gato. De sumergirse, disfrutar y vivirlo. Por que hay infinitas maneras de leer, eso si que es verdad. Pero soy de las que piensa que la conciencia crítica muchas veces te mediatiza la lectura de la peor manera.

Y hay libros de entretenimiento de alta calidad, muy alta, que han vendido una burrada de ejemplares. ¿Por eso van a ser malos? Si cumplen con la función de su género, para nada.

Banda sonora de esta nota: Derroche, versión de Ana Belén con Juan Luís Guerra.

24.2.06

He vuelto....

Saludos a todos. Me he tirado más de veinte días sin internet por culpa de mi anterior proveeedor de servicios. Al final una oportuna denuncia igual hasta ha servido para acelerar los trámites...el caso es que estoy de nuevo en la carretera. Parece mentira que esto de tener internet y no tenerlo se parece tanto a los estados de dependencia...empiezas por estar de los nervios, cabreada con el universo y la legislación que permite a estas compañías dejarte de cobrar pero no liberar la línea sólamente por dar por saco, hablando mal y pronto. Acabas por resignarte cristianamente ya que tienes claro que agobiar a la teleoperadora no sirve absolutamente para nada. Más que nada porque siempre te atiende una distinta, o quizás es la misma que se cambia el nombre para que tengas que explicarle otra vez toda tu vida e ir cobrando del teléfono de pago. Luego vuelves a tomarte el café en el bar para leerte el periódico y ver como amanece el mundo cada mañana. Y cogiendo los horarios de la RENFE cuando pasas por la estación por si acaso. Consultando los horarios del cine en la cartelera de la prensa. Mandando mensajes en vez de correos electrónicos, disfrutar del frio en la calle. Y la resignación da paso a la indiferencia, a leer en la cama en vez de consultar correos (en una posición mucho más comoda) y a agobiar a tu perra vieja con paseos de más de media hora. Piensas entonces donde queda aquella mala leche con el universo... hasta que un día viene un repartidor de mensajeria, te trae un router y... lo dejas en la mesa tranquilamente. Mejor que lo instale mi hermana que se le dan mejor estas cosas, piensas (yo soy una tocha con todo lo que lleve cd de instalación). Hasta ayer....claro...

Sin que sirva de precedente, os he echado de menos.

Banda sonora de esta nota: Volver interpretado por Chavela Vargas